01 de Marzo, 2023
En este escueto resúmen tenemos algunos Ãtems a tener en cuenta para orientarnos a ver si nuestra mascota tiene algún trastorno neurológico.
1.-Alteraciones de la marcha.
Percibir alteraciones en la marcha del perro, que también podrÃamos definir como cambios o anomalÃas en su forma de caminar, puede ser una señal de que nuestro perro padece problemas neurológicos. Generalmente podemos apreciar:
? Ataxia o incoordinación: este tipo de alteración de la marcha en la que los miembros pierden su coordinación, podemos observar desde que el paciente se inclina hacia un lado, que su rumbo se desvÃa, que al intentar caminar sus miembros se cruzan o que arrastra alguna de las extremidades, se tropieza o es incapaz de realizar un movimiento concreto.
? Movimiento en cÃrculos: suele ir asociado a otros sÃntomas y pueden deberse a lesiones en múltiples localizaciones del sistema nervioso. No tendrÃa mayor importancia si el perro realiza este movimiento durante el juego, antes de acostarse o de forma puntual. Pero si observamos que al intentar caminar sólo es capaz de moverse girando en un sentido.
2- Debilidad o parálisis de las extremidades.
La parálisis en las extremidades es una de las posibles señales de problemas neurológicos. Junto a la debilidad suele aparecer dolor de una o varias extremidades y suele ser progresivo si se trata de un problema degenerativo, por desgaste crónico de las articulaciones, aunque también puede deberse a un problema de tipo neurológico.
La enfermedad articular degenerativa en la que se produce compresión de la médula espinal o por otras causas (ya sean infecciones, traumatismos, hernias discales, etc), en las que la edad será más variable.Si tu perro presenta cojeras intermitentes, debilidad del tercio anterior o posterior, no tiene tantas ganas de moverse como antes, se queja al manipularlo por la cadera, la rodilla o alguna otra articulación, o lo más severo, tiene dificultades para mantenerse en pie o directamente le es imposible.
3- Alteración del estado mental.
Existen manifestaciones muy diversas.En casos en los que existe una alteración a nivel del Sistema Nervioso Central (cerebro o tronco encefálico), es frecuente que el animal presente un estado mental alterado: lo podremos ver decaÃdo, que apenas interaccione con el entorno, o puede que se quede parado presionando su cabeza contra la pared o algún mueble (lo que se conoce como head pressing).
Si está enfermo, podrá presentar un estado mental desde deprimido (se mostrará somnoliento pero despierto, alternando periodos de inactividad con otros de actividad breve); en estupor (se muestra dormido y sólo responde a estÃmulos nociceptivos o dolorosos) o comatoso (el animal se encuentra inconsciente y no responde a ningún estÃmulo), en función de la gravedad; y puede o no venir acompañado de otras alteraciones del comportamiento.
4-. Cabeza ladeada.
Puede ir acompañada de otros sÃntomas, como movimiento involuntario y repetitivo del ojo, ya sea en horizontal, vertical o circular y suele afectar a ambos ojos), movimiento en cÃrculos, pérdida auditiva o del equilibrio. Es muy frecuente que esté asociado a una lesión en el oÃdo interno conocida como sÃndrome vestibular canino.
. 5-. Temblores generalizados.
En situaciones no fisiológicas, es decir, sin que haga frÃo o estando en reposo, debe ponernos en alerta y debemos observar en qué momentos le ocurre, si presenta otros sÃntomas y con toda la información acudir a nuestro veterinario. Para este tipo de alteraciones, es muy útil el soporte audiovisual, como la realización de vÃdeos, para ayudar en el diagnóstico.
6.- Alteración de los sentidos.
? Olfato: el perro no muestra interés por algo a nos ser que lo oiga o visualice, no rastrea, si le ofrecemos un premio que no puede ver no lo detecta o si le ponemos delante un olor fuerte y que no suele gustarles como el vinagre no muestran un rechazo.
? Vista. Si detectamos que súbitamente, nuestro animal parece que no ve correctamente (se muestra más inseguro al caminar, choca con objetos, tropieza en los escalones, etc).
? OÃdo: con la edad, nuestro perro puede ir perdiendo capacidad auditiva por degeneración de sus estructuras. Sin embargo, también puede deberse a una lesión neurológica y una vez más, las causas pueden ser diversas.
? La dificultad para deglutir o lamer también puede responder a una alteración neurológica. Puede ir acompañada de salivación excesiva o asimetrÃa facial.
Tacto: una lesión neurológica a nivel espinal, puede perder sensibilidad, además de habilidades motoras. También puede darse el caso contrario, es decir, un aumento de sensibilidad, sensación de hormigueo o dolor neuropático en el que pueden llegar a autolesionarse gravemente.
7-. Convulsiones.
Las convulsiones en los perros pueden ser Parciales asociadas a alteraciones motoras como temblor de la cabeza, contracción de una extremidad, apertura involuntaria de las mandÃbulas, etc. Y pueden ir o no acompañadas de alteraciones en el comportamiento como "cazar moscas imaginarias", ladrar sin motivo, perseguirse el rabo, mostrarse agresivo sin ser amenazado, etc. La crisis parciales pueden llegar a generalizarse. Generalizada: en este tipo de convulsión, suelen aparecen también alteraciones motoras, pero esta vez afectando a una mayor extensión corporal, como contracciones musculares involuntarias, rigidez del cuello y extremidades, animal en decúbito, apertura de la boca, pedaleo y pueden aparecer también manifestaciones vegetativas como micción/defecación o ptialismo (exceso de salivación) e incluso pérdida del conocimiento o pérdida momentánea del tono muscular.
. Es por ello que es fundamental llegar al diagnóstico correcto con el prfesional especializado, para poder encontrar la localización exacta de la lesión, su origen y poder asà ofrecer al paciente la mejor solución posible.
Es el periodo en el que el animal se encuentra receptivo sexualmente y posee la capacidad de reproducirse.
Se viene la época de pulgas y garrapatas. Comencemos con la prevención.
Es muy importante la concientización al momento de tener una mascota.
Sugerencia a tener en cuenta para que la convivencia sea placentera.